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Pastel de cabracho con salsa bearnesa
2023-04-05
El pastel de cabracho es un plato típico de la cocina asturiana, que consiste en una masa elaborada con carne de cabracho desmenuzada, huevos, nata y pan rallado, que se cuece al baño maría y se sirve frío o templado. En esta ocasión, lo acompañamos con una salsa bearnesa, una salsa francesa a base de mantequilla, yema de huevo, vinagre y estragón. La salsa bearnesa le aporta un sabor suave y aromático al pastel de cabracho, que contrasta con el sabor intenso del pescado.
Ingredientes
Para el pastel de cabracho:
- 1 kg de cabracho limpio
- 1 cebolla
- 1 zanahoria
- 1 puerro
- 2 hojas de laurel
- Sal
- Pimienta
- 4 huevos
- 200 ml de nata líquida
- 50 g de pan rallado
- Mantequilla para engrasar el molde
Para la salsa bearnesa:
- 250 g de mantequilla
- 4 yemas de huevo
- 4 cucharadas de vinagre de vino blanco
- 2 chalotas
- Un puñado de estragón fresco
- Sal
- Pimienta
Preparación
- Para hacer el pastel de cabracho, ponemos en una olla el cabracho limpio y troceado junto con la cebolla, la zanahoria, el puerro y las hojas de laurel. Cubrimos con agua y salpimentamos al gusto. Llevamos a ebullición y dejamos cocer a fuego medio durante unos 20 minutos o hasta que el pescado esté hecho.
- Escurrimos el pescado y lo desmenuzamos, retirando la piel y las espinas. Lo ponemos en un bol y lo mezclamos con los huevos batidos, la nata líquida y el pan rallado. Salpimentamos al gusto y trituramos con una batidora hasta obtener una masa homogénea.
- Engrasamos un molde rectangular con mantequilla y vertemos la masa del pastel. Alisamos la superficie con una espátula y cubrimos el molde con papel de aluminio. Lo colocamos en una bandeja de horno con agua caliente y lo cocemos al baño maría a 180ºC durante unos 40 minutos o hasta que esté cuajado.
- Dejamos que se enfríe un poco antes de desmoldar el pastel sobre una fuente. Lo podemos servir frío o templado.
- Para hacer la salsa bearnesa, ponemos en un cazo el vinagre, las chalotas picadas y la mitad del estragón picado. Llevamos a ebullición y dejamos reducir a fuego medio hasta que quede una cucharada de líquido. Colamos y reservamos.
- En otro cazo, derretimos la mantequilla a fuego suave y la clarificamos, retirando la espuma que se forma en la superficie. Reservamos.
- En un bol al baño maría, batimos las yemas de huevo con el vinagre reducido hasta que espumen y adquieran una consistencia cremosa. Sin dejar de batir, vamos incorporando poco a poco la mantequilla clarificada en un hilo fino hasta obtener una salsa emulsionada. Salpimentamos al gusto y añadimos el resto del estragón picado. Reservamos la salsa al calor.
- Servimos el pastel de cabracho en porciones, acompañado de la salsa bearnesa en una salsera aparte para que cada uno se sirva a su gusto.