Preparación

1. Para hacer el bacalao confitado, ponemos el aceite en una cazuela amplia con los ajos pelados y enteros y el laurel. Calentamos el aceite a fuego muy suave hasta que alcance unos 70ºC. No debe hervir ni humear. Si no tenemos termómetro, podemos comprobar la temperatura introduciendo un trozo de pan en el aceite: si burbujea ligeramente, está listo.
2. Secamos bien los lomos de bacalao con papel de cocina y los sumergimos en el aceite caliente. Los cocinamos durante unos 15 minutos o hasta que veamos que se separan las lascas del bacalao. Los sacamos con cuidado y los reservamos en una fuente. Colamos el aceite y lo reservamos para otro uso.
3. Para hacer la crema de coliflor, limpiamos la coliflor y la troceamos en ramilletes pequeños. La ponemos en una olla con agua y sal y la cocemos hasta que esté tierna, unos 20 minutos. La escurrimos bien y la pasamos a un vaso de batidora o a un procesador de alimentos. Añadimos la leche, la mantequilla, sal, pimienta y nuez moscada al gusto. Trituramos hasta obtener una crema fina y homogénea. La reservamos al calor o la calentamos en el microondas antes de servir.
4. Para hacer el crujiente de jamón, ponemos las lonchas de jamón entre dos hojas de papel de cocina y las metemos en el microondas durante unos 2 minutos o hasta que estén secas y crujientes. Las dejamos enfriar sobre una rejilla y las troceamos con las manos o con un cuchillo.
5. Para servir, ponemos una cucharada de crema de coliflor en el centro de cada plato y alisamos con el dorso de la cuchara. Colocamos encima un lomo de bacalao confitado y espolvoreamos con el crujiente de jamón. Decoramos con unas hojas de perejil si queremos y servimos calientes este plato de bacalao confitado con crema de coliflor y crujiente de jamón.